domingo, 26 de agosto de 2012

TAPA REVISTA Nº 94 DE AGOSTO 2012



APRENDIENDO A VIVIR EN UN NUEVO MUNDO Por Ruth Ross

COMPARTIENDO MI AHORA (Nº 94)         

¿Cómo empezar mi columna de este mes? Quizás contándote que estoy viviendo un período más que profundo, duro y difícil en mi vida.
Para vos que me lees mes a mes, recordarás que toda mi familia vive en Israel, (y si tomas esta revista por primera vez, te estás enterando) y que en octubre de 2010 estuvimos allí, Sergio, Iara (nuestra hija menor) y yo. Bien, en ese momento a mamá le detectaron que tenía cáncer.  Estando allí, logré cerrar un círculo desde el amor más profundo; pude hablar mucho con mamá y papá, tanto de lo que podían comprender a un nivel consciente, como de aquello que va más allá de nuestras mentes, egos y pensamientos. También les di a ambos el primer nivel de Reiki. Desde que supe la enfermedad de mamá, comprendí también que esa era la oportunidad que el Universo me estaba dando para despedirme y que nunca la volvería a ver de cerca físicamente. La última imagen que quedó grabada en mi retina es la del auto de mi cuñado arrancando con nosotros a bordo rumbo al aeropuerto para regresar a nuestro país, mientras que mamá corría por las escaleras intentando que no la viéramos y yendo a buscar a papá que lloraba en un rincón escondido.
Lo que siguió fue una serie de ocho largos, crueles y devastadores meses de quimioterapia. Luego pareció que hubo una mejoría, y de pronto… encontraron que había algo más… y recetaron tres nuevos meses de quimio. Para ese momento, el ser de mamá se me apareció y
me expresó su amor, y me pidió que no la sometieran a ninguna quimio, puesto que había decidido partir y la  quimio no iba a ayudarla, sino todo lo contrario, por lo que pedía que se la dejara disfrutar de la vida. Yo hablé con mi familia y les dije que no le hicieran nada, pero no se puede ir contra las creencias de que todo se cura con la medicina tradicional.  Fueron otros tres meses muy duros, y cuando llegaron a la última sesión, felices porque en teoría mamá estaría curada, se enteraron de que el tratamiento, en vez de mejorar la situación, la había situado en un lugar de no retorno. Desde lo humano averigüé que posibilidades habría para viajar, que por supuesto fueron nulas. Para colmo desde hace meses, la comunicación
telefónica se ve obstaculizada desde todos los lugares, evitándome poder hablar con cualquiera de mis familiares. Es una cuestión energética, lo sé. Tengo que estar cerca, pero desde otro plano.
Hasta hace cerca de un mes y medio, nos veíamos con la camarita y hablábamos o nos escribíamos. Ella aún estaba consciente, papá intentaba disimular para cuidarla y cantaba y hacia chistes… Pero de pronto y tan rápido como su ser me anunció que ocurriría, se vino abajo. Nunca más pude volver a verla. De golpe estuvo dos días dormida profundamente, le daban horas… Mi hermana me iba poniendo al corriente con mails de cómo seguía la situación y, en ese momento, me puse a llorar a los gritos y le decía a Sergio que ni siquiera me había podido despedir. Y fue en ese instante cuando sonó el teléfono y era mi papá, y mientras yo pensaba que era para anunciarme el desenlace, la realidad fue que mamá se había despertado para hablar conmigo, y entonces nos pudimos despedir.
La situación actual, en este aquí y ahora, muestra a mamá en su fase más que terminal, internada. Y tengo que lograr mantener mi equilibrio en toda esta situación.
¿Cómo se vive este proceso a la distancia? No es fácil… A veces me despierto de madrugada y ya empiezo con las visualizaciones constantes y un gran trabajo de apoyo y asistencia. Por momentos siento agotamiento, dolor de mi cuerpo, otras siento mucha angustia… Hay días y días en los que no tengo ningún tipo de noticias ya que mi hermana corre todo el tiempo para atender a mamá y a papá y no tiene tiempo de escribirme. Trato de vivir el aquí y el ahora. Continúo trabajando como terapeuta, sin olvidarme que la vida siempre continúa, aunque una cosa es estar allá poniendo el cuerpo a la situación y otra muy diferente es estar a la distancia, y ante todo, me niego a velar a nadie por adelantado.
Por supuesto que también en el proceso lloro mucho, mucho, mucho.  A veces me siento como una niñita muy pequeña llamando a su mamá, pero, básicamente...creo que por el momento lo estoy sobrellevando.
También siempre supe que esta  gran vorágine de purificación lleva a que muchas personas estén partiendo o vayan a partir y que esto es inevitable, porque es una decisión de cada alma estar o no estar en estos tiempos.
Por último quiero decirte que estoy segura de que mamá estará bien cuando se vaya, que estará libre por fin,  en la paz y la felicidad eternas.
Gracias por compartir este momento conmigo.

Nota: Esta columna fue escrita en el mes de julio, para que entrara en la revista de agosto. Ya cuando salió la revista de agosto en papel a la calle, mamá había partido. Sé que está bien y en paz, y yo también lo estoy, pero de eso… te contaré el próximo mes.


TEMAS (Nº 94) 

"HAY EMOCIONES QUE PUEDEN MATARTE” 

(De:www.elblogalternativo.com)


Entrevista a: Stella Maris Maruso, terapeuta 
que aplica la psiconeuroendocrinoinmunología:


Tengo 55 años. Nací en Buenos Aires, donde vivo.          
Educo a personas que atraviesan crisis severas. Estoy casada y he criado cuatro hijos. ¿Política? Ayudar a los demás a vivir hasta el último instante. ¿Dios? No soy religiosa, soy espiritual: experimentar la trascendencia me sana
¿Cuántos pacientes?
Casi 30.000 en los últimos 30 años, con enfermedades de todo tipo, cánceres...
¿Cómo los ayuda?
No tratando de no morir, sino de vivir hasta morir. De morir bien.
¿Qué es morir bien?
Vivir hasta el último instante con plenitud, intensamente. Vivir más no es más tiempo, sino sentirte alegre por estar aquí y ahora.
¿Acaso no vivían antes de enfermarse?
¡Muchos agradecen que su cáncer les haya enseñado a ser felices, a vivir! La enfermedad es una oportunidad de enriquecerse.
Mejor que no llegue.
¡Pero llega! El dolor entra en todas las casas. ¡Y esto hay que saberlo! Deberíamos aprender desde niños que morir es parte de la vida, y a fortalecernos en cada contrariedad.
No nos lo enseñan, es verdad.
Al no aprender a dominar la mente, vivimos arrastrados por ella. Eso es malvivir. ¡La mente es demasiado loca para confiarle tu vida! Confíale tus negocios, ¡pero no tu vida!
¿Por qué no?
La mente va de excitación en excitación, te impide gozar la vida. Los médicos dicen que padecemos "síndrome de déficit de deleite": ¡no sabemos gozar de lo que nos da la vida! Yo lo procuro.  Un 10% es lo que te pasa y un 90% es lo que haces con lo que te pasa.
Cuestión de actitud. ¿Cuál es la mejor?
Sentir pasión ante la incertidumbre de la vida, ante lo que sea que vaya a traerte.
¿Sea lo que sea?
Sí. Los psiquiatras detectan que hoy padecemos de neurosis noógena: falta de responsabilidad y sentido de la propia existencia.
Pues sí que andamos mal.
Sí, pero la ciencia vanguardista trae buenas noticias: acudiendo a tu interior puedes obtener todo lo que necesites, producir endógenamente todas las drogas analgésicas, euforizantes... ¡Puedes aprender a sanarte!
¿Y prescindir de la medicina?
Hablo de la tercera revolución de la medicina: después de la cirugía y los antibióticos, llega la psiconeuroendocrinoinmunología.
A ver si me cabe la palabra en una línea.
Es la disciplina que integra psiquismo y biología, tras treinta años de investigaciones de sabios como Carl Simonson, Robert Ader, Stanley Krippner...
¿Qué postulan?
La interconexión del sistema nervioso central, el nervioso periférico, el endocrino y el inmunológico. Te lo resumo: ¡las emociones modifican tu capacidad inmunológica!
¿O sea que una emoción puede enfermarme?
La angustia ante lo incierto, el miedo, la desesperanza, el remordimiento, la rabia... ¡Cada una tiene su bioquímica! Y es venenosa, es depresora del sistema inmunológico.
¿De un día para otro?
La salud no es un estado: es un proceso, y muy dinámico. ¡Por tanto, siempre puedes reforzar tu salud si trabajas tus emociones!
¿Las trabaja usted con sus pacientes?
Sí. Hay pacientes ordinarios, sumisos a creencias establecidas, y pacientes extraordinarios, que generan creencias sanadoras.
Creer que puedes curarte... ¿puede curarte?
Hay un viejo experimento famoso: a cuarenta mujeres con con cáncer de mama, el médico les contó que la quimioterapia las dejaría calvas. Luego, sólo suministró quimioterapia a veinte mujeres y dejó que las otra veinte creyesen recibirla...
Y no me diga que...
Sí, sí: el 60% de las segundas quedaron tan calvas como las tratadas con quimioterapia. ¿Qué modificó la bioquímica interna de esas mujeres? ¡Sus propias creencias!
Inducidas por el médico.
Lo que demuestra el enorme poder del médico. ¡El médico puede estimular con su actitud la capacidad auto curativa del paciente! Un hijo mío es médico: a él y a todos los médicos les ruego que jamás le digan a un paciente que su condición biológica es irreversible. Ese es el único pecado médico.
Pues hay diagnósticos que desahucian.
Son condenas: matan más que el tumor. Acepta el diagnóstico que sea, ¡pero jamás aceptes un pronóstico! Jamás: si abandonas la esperanza de mejorar, de luchar por tu propia salud..., activas el suicidio endógeno.
Pero sembrar falsas esperanzas...
¿Falsas? A mi padre le pronosticó el médico tres meses de vida por un diagnóstico de cáncer de próstata diseminado al hígado. Trabajamos juntos con amor, relajación, meditación, nutrición... y al año no tenía células cancerosas. Vivió 18 años más.
¿Qué dijo su médico?
“Milagro", dijo. Remisión espontánea. Desde ese día cerré mi empresa y me volqué a ayudar a otros como a mi padre. Y yo hoy vivo en la frontera del milagro: la remisión es un efecto colateral en enfermos que han abrazado las fuerzas de la salud, la vida.
¿Cómo han dado ese abrazo?
Sintiendo que la enfermedad enriquece su vida y que morir no es un castigo, ampliando el círculo de lo que les importa y poniéndose al servicio con amor por la vida que nos traspasa, escapando de su cabeza y empezando a sentir: a reír, a llorar... Se han permitido asombrarse y han experimentado estados de trascendencia.
¿Qué entiende por trascendencia?
Liberarte de tu historia pasada y del temor por la futura. La meditación ayuda mucho. Y eso cambia tu bioquímica: estás sano, ¡vives! Por el tiempo que sea, estás vivo.





EL MARAVILLOSO DESPERTAR DE LA CONSCIENCIA  Por Sergio Lipp

EL AÑO EN EL QUE TENEMOS QUE TERMINAR DE DECIDIR (Nº 94)

Estamos viviendo uno de los años más relevantes de la historia de la humanidad. El año en el que tenemos que terminar de decidir. Decidir qué vida queremos tener, que planeta Tierra imaginamos, en definitiva, volver (aunque sea un camino que transitaremos paulatinamente) al Edén, el mismo que reflejan los libros sagrados de todos los orígenes que conocemos, en definitiva (aunque hoy nos parezca increíble) lo que alguna vez fuimos y que nosotros mismos nos encargamos de destruir.
Decía, que es el momento de terminar de decidir, aunque muchos hemos ya tomado la decisión desde hace tiempo y asumimos la responsabilidad que sentíamos que teníamos que asumir. Elegimos claramente colaborar para la evolución de nuestro planeta y la de todos sus integrantes. También hay muchos que ya decidieron y no son todavía conscientes de ello, porque esta lección no pasa por la mente, no pasa por el ego, no es una moda ni un cambio superficial; es una reflexión mucho más profunda, es una toma de consciencia, es una decisión del alma, que es la que honra y respeta la sabiduría Divina. Porque es el alma el que nos acompaña desde siempre, el que eligió venir en este momento a transitar la experiencia de esta evolución. Es más, tanto decide nuestro alma, que se traduce en definitiva en lo que verdaderamente somos, es el que eligió vivir esta vida, sobre todo, para los que tenemos cierta edad, cuando el destino que tenía la Tierra era el del Apocalipsis más pleno, como bien lo refleja la Biblia, y que significaba ni más ni menos que la destrucción de nuestro planeta por una guerra nuclear producto del enfrentamiento entre la vieja Unión Soviética y los Estados Unidos, y ese destino, queridos hermanos, fue cambiado porque muchos, y les repito estamos hablando a nivel del alma, decidimos darnos una oportunidad y así fue elevado hacia las esferas más altas y nos fue concedido.
Te decía que hay muchos que han decidido y aún no son conscientes de ello, pero sin embargo, los que estamos atentos lo podemos observar claramente. Un ejemplo de esto es cuando personas que hasta hace un tiempo no tan lejano hubieran negado la existencia de determinadas cosas, y hoy, increíblemente hablan naturalmente de energía, Reiki, vidas pasadas, percepciones, etc. Les recomiendo ponerse en observador objetivo y ver, simplemente de esa forma, la televisión.
También hay otras personas que aún no han hecho su elección. A ellas solamente les puedo decir que ahora es el momento y no después. Ya no hay más tiempo ni lugar para que existan los indecisos o quienes, y se respeta su decisión, a quienes eligieron la oscuridad.
Es casi simple, si este mundo va en camino de mayor luz, de evolucionar hacia dimensiones más elevadas, quienes no acompañen ese tránsito sencillamente se van a quedar en el camino. Es como un gran embudo que va angostándose para pasar por él y salir del otro lado de otra manera totalmente distinta a la que estaba acostumbrado, porque del otro lado todo es mucho más elevado. No hay posibilidad de pasar tal cual somos ahora.
De cualquier manera es su libre albedrío y nadie como el Supremo Creador para respetarlo.



LA PAZ PERFECTA (Nº 94)

Había una vez un Rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta.
Muchos artistas lo intentaron. El Rey admiró y observó todas las pinturas, pero solo hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas.
La primera era un lago muy tranquilo, era un espejo perfecto donde se reflejaban unas plácidas montañas que lo rodeaban.
Sobre estas se encontraba un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos los que miraron esta pintura pensaron que esta reflejaba la paz perfecta.
La segunda pintura, también tenía montañas, pero estas eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual brotaba un impetuoso aguacero con rayos truenos. Montaña abajo parecía el retumbar un espumoso torrente de agua.
Todo esto no se revelaba para nada pacífico.
Pero cuando el Rey observó cuidadosamente, vio tras la cascada un delicado arbusto creciendo en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido.
Allí en el rugir de la violenta caída de agua, estaba sentado plácidamente un pajarito en medio de su nido... Paz perfecta.
El Rey escogió la segunda.
Y explicó a sus súbditos el porqué: Paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro ni dolor. Paz significa que a pesar de todas estas cosas permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón.


SOLTANDO REALIDADES Por Ruth Ross (Nº 94)


¿A qué clase de realidad te aferras?
¿Cuál es el personaje que crees que estás interpretando en tu vida?
¿Quién crees que eres en realidad?
¡Hay tantas realidades vividas y por vivir!. ¡Hay tantas y tantas oportunidades para cambiar, para dar el salto transformador y sanador de nuestras vidas!.
Hay un solo impedimento para soltar las realidades y, ese impedimento viene de la mano de una palabra que no es otra que: Miedo.
En la vida debemos aprender a vivir sin las falsas garantías que la sociedad determina que necesitas para estar protegido, cuando en verdad te someten a una atadura constante.  Falsas garantías que te llevan a vivir encerrado  y lleno de miedo, dolor, enfermedad. 
La realidad que has venido a transitar es la del aprendizaje desde lo más profundo de tu ser. Es aquella que te habla directamente desde el corazón y no desde la mente.
Cuando logras el objetivo de “entregar” a Dios, a tu “luz propia” y lo haces desde tu corazón, sientes un bálsamo, sientes  libertad en tu vida.
¡Y si pudieras darte cuenta que el miedo es contrario al AMOR!.  ¡Que el AMOR todo lo puede, lo cura y que camina junto a la LUZ y a la VERDAD!, lograrías despojarte de todos los miedos y podrías empezar a SOLTAR por completo una a una esas realidades que te atan, que te condicionan, que no te dejan ser.

LO MEJOR DE "MENSAJEROS DE LUZ"


DE  SAN FRANCISCO DE ASÍS (Del Nº 62)

Aquel amor que vuela muy alto tiene una gran característica: que vuela alto pero vuela para todos. Y vuela alto pero todos lo pueden alcanzar. Pero se hace sentir también en lo bajo. Y le puedes oír y ver  a pesar de su altura. Y vuela tan alto que llega a todos los tiempos, a todas las razas, a todos los credos, y a todos los hombres y a toda la creación. Y todos pueden conocerle solamente con el agua del espíritu, el agua de tu cuerpo ya lo conoce. Pero tu cuerpo no puede remontar tan alto y tan sublime como la cúspide de su luz. Cuando la desgracia toca un corazón el amor la erradica. Cuando un dolor llega a tu pecho el amor lo limpia. Cuando un enemigo llega a tu vida el amor lo hace amigo. Y cuando el amor llega al temor no hace más que darte la fe, esa que tú buscas quizás no en el amor sino en la ansiedad,  no en el amor sino en la expectativa, no en el amor sino en el cumplimiento de tus sueños.


EL PERRO Y EL CONEJO (Del Nº 60)


Un señor les compró un conejo a sus hijos.
A su vez, los hijos del vecino le pidieron una mascota a su padre.
El hombre compró un cachorro Pastor Alemán.
El vecino exclamó:
- ¡Pero él se comerá a mi conejo!
- De ninguna manera, mi pastor es cachorro. Crecerán juntos, y serán amigos. Yo entiendo mucho de animales. No habrá problemas.
Y parece que el dueño tenía razón. El perro y el conejo crecieron juntos y se hicieron amigos. Era normal ver al conejo en el patio del perro y al revés.
Un viernes, el dueño del conejo se fue a pasar un fin de semana en la playa con su familia.
El domingo en la tarde el dueño del perro y su familia tomaban una merienda, cuando entró el perro a la cocina.
Traía al conejo entre los dientes, sucio de sangre y tierra, y además muerto. Casi matan al perro de tanto agredirlo.
Decía el hombre:
- ¿El vecino tenía razón, y ahora que haremos?.
La primera reacción fue echar al animal de la casa como castigo, además de los golpes que ya le habían dado.
En unas horas los vecinos iban a llegar. Todos se miraban, mientras el perro afuera lamía sus heridas.
Uno de ellos tuvo la siguiente idea:
- Bañemos al conejo, lo dejamos bien limpiecito, después lo secamos con el secador y lo ponemos en su casita en el patio.
Así lo hicieron; hasta perfume le pusieron al animalito. Quedo lindo! ‘parecía vivo’, decían los niños, y allá lo pusieron, con las piernitas cruzadas como si estuviese durmiendo.
Luego al llegar los vecinos se sintieron los gritos de los niños.
No pasaron cinco minutos cuando el dueño del conejo vino a tocar a la puerta, algo extrañado.
- ¿Que paso?, le dijo su vecino.
- El conejo murió.
- ¿Murió?
- Si, murió el viernes.
- ¿Murió el viernes?
- Si, fue antes de que viajáramos. Los niños lo habían enterrado en el fondo del patio…

¡Qué bueno sería, que alguna vez nos demos cuenta que las apariencias engañan!



¿QUÉ QUIERE EL HOMBRE? Por Jaime Barylko (Del Nº 75)


Uno nace y quiere ser feliz. Pero ¿en qué consiste ser feliz?
El religioso es feliz cuando reza y siente un contacto con lo  trascendente. El ateo es feliz en su piel, en su cuerpo, en el  cumplimiento de sus instintos. Yo era feliz, en mi soledad  sonora de pensar, estudiar, escuchar a Bach.
Ser feliz es cumplir con un designio. Ese designio se vuelve propio, pero en un principio es ajeno, es de los otros, de la  tradición, de la trama del tiempo en que vivimos y de la  educación que recibimos. Miguel Ángel no significa nada para quien no se haya formado en los valores estéticos de  Occidente, y la pintura china no nos emociona demasiado cuando la enfrentamos.
Por otro lado, están el sufrimiento, el dolor injustificado, los accidentes de la existencia, los seres queridos que se van y no vuelven. La muerte acecha como el ocaso del sol.
Caminar es enfrentar retos y superar escollos. Vivir es autodefinirse constantemente. Hasta el fin, es decir, hasta que se de el fin.
Pensar es vivir. Vivir auténticamente, con conciencia de lo que yo quiero y de lo que otros quieren que yo quiera. Pensar  es detener la parafernalia en la que estamos insertos,  retirarnos un poquito, contemplar, formular preguntas e  intentar hallar respuestas.
Pensar es una manera de colocarse frente al mundo, al otro, a las cosas; es una postura. Y también, un ejercicio, una práctica, un aerobismo del alma. Pensando es como tomamos nota de nuestra circunstancia actual y de nuestra circunstancia  pasada, y de nuestro origen, y del origen de tantas ideas, imágenes y sentimientos.
Se necesita del pensamiento humano para saber por qué vivimos, por qué morimos, para que estamos, y por qué se  sufre, inútilmente, injustamente, y cómo consolarnos de tanta pérdida intermitente. Algo que nos contenga, que nos consuele, que nos explique.
Esto es el hombre. Un ser que pregunta, que se pregunta, y que nunca dejará de preguntarse por mas respuestas que reciba.
                

GRANDES SERES DE LUZ (Del Nº 47)

Sri Sri Ravi Shankar (1956 - India) Es un líder humanitario y espiritual. Sus principales actividades son promover la paz y restaurar los valores del individuo. Es mediador y negociador por la paz en zonas de conflicto; otorga ayuda en zonas de desastre y presta auxilio en zonas de pobreza.  En 1981 fundó la ONG “El Arte de Vivir”, hoy presente en más de 140 países.  En 1987 funda la Organización Internacional para los Valores Humanos. Fue tres veces nominado al Premio Nobel de la Paz.

“Si haces el bien a los demás, lo haces debido a tú naturaleza.  Olvida como se comportan ellos, como reaccionan contigo. Eso es asunto de ellos. Que carguen ellos su cruz. Mantén tu mente libre”.
“Todo está cambiando. Y todo esto existe sólo para molestarte, para cocinarte. Te cocinas en felicidad y te cocinas en dolor. Te cocinas con este asunto y también con ese otro asunto. De modo que todo en el mundo te cocina. Y si metes el dedo más profundo, te quemarás. Y entonces... Muévete liviano”.
“Cuesta entender que el mundo entero es nuestra casa”.
“Lo más importante es experimentar ese Algo que no cambia, ese Algo que no muere, ese Algo en ti que no se descompone”.
“La vida es un paquete lleno de obsequios, de sorpresas para ti”.
“Hay un lugar para cada persona en el corazón de la Divinidad”.
“Solemos pensar en la antigüedad en términos de barbarie; pero basta con mirar los juguetes que usan los chicos de hoy y preguntarse : ¿Representan, en verdad, tales objetos, una sociedad civilizada o refinada?”.
“Mira los motivos que hay detrás de tus acciones. A menudo no vas tras las cosas que realmente quieres. Vas hacia ellas porque hay alguien que quiere que lo hagas, o por lo que otros pueden pensar, hacer o decir acerca de ello”.
“Nos identificamos como alguien - pertenezco a esta religión, a esta cultura, a esta tradición, pero nos olvidamos que la identidad básica es que somos seres humanos.  Cuando colocamos esto en primer término, todas las demás identidades se encolumnan detrás.  Es ahí cuando pienso que podemos lograr aquello que realmente estamos buscando”.
"Al ofrecer toda la negatividad, te liberas. Al ofrecer todas las virtudes que crees posees, te vuelves libre”.
“Sueles limpiar tus ventanas, limpiar tus mesas, lavar tu ropa, pero se te olvida lavar tu mente”.
“Es la manera de involucrarte con lo que “ves”, el perderte en las escenas externas, eso es lo que causa las ataduras. Si no te pierdes, la mente está libre”.
“Sentimos ansias por lo que no tenemos, y siempre habrá alguna cosa que no tengamos”.
“¿Cómo puedes ser siempre feliz? Olvídate del siempre y entonces serás feliz”.

“Solo información no es educación. Culturizar nuestro comportamiento, culturizar nuestra actitud y la habilidad para percibir las cosas de una mejor manera, es educación”.
“A todos les gusta hablar de los problemas, pero difícilmente proponen soluciones”.
“Es fundamental que comencemos a vernos como seres espirituales que comparten una experiencia humana en común”.
“Cuando los sentidos están en calma, el alma también lo está”.
“Cuando uno se desconoce a sí mismo, y queda atrapado en su pasado, se obsesiona con la culpa. Y así nunca podrá abrirse, florecer”.
“Somos muy pobres si tenemos una sonrisa frágil”.
“La religión es la cáscara y la espiritualidad es el fruto”.


LA VAQUITA     (Del Nº 32)

Un maestro de la sabiduría paseaba por un bosque con su fiel discípulo, cuando vio a lo lejos un sitio de apariencia pobre, y decidió hacer una breve visita al lugar. Durante la caminata le comentó al aprendiz sobre la importancia de las visitas,  también de conocer personas y las oportunidades de aprendizaje que tenemos de estas experiencias. Llegando al lugar constato la pobreza del sitio, los habitantes, una pareja y tres hijos, la casa de madera, vestidos con  ropas sucias y rasgadas, sin calzado, entonces se  aproximó al señor, aparentemente el padre de familia y le preguntó: ¿cómo hacen el señor y su familia para sobrevivir?          
 El señor calmadamente respondió: amigo mío, nosotros tenemos una vaquita que nos da varios litros de leche todos los días.  Una parte del producto la vendemos o la cambiamos por otros  géneros alimenticios en la ciudad vecina y con la otra parte producimos queso, cuajada, etc., para nuestro consumo y así es como vamos sobreviviendo.    

                                                                                             El sabio agradeció la información,  contempló el lugar por un momento, luego se despidió y se fue. En el medio del camino, se volvió hacia su fiel discípulo y le ordenó al aprendiz: busque la vaquita, llévela al precipicio de allí enfrente y empújela al barranco. El joven espantado miró  al maestro y lo cuestionó sobre el  hecho de que la vaquita era el medio de subsistencia de aquella familia, más como percibió el silencio absoluto del  maestro, fue a cumplir la orden. Aquella escena quedo grabada en la memoria de aquel joven durante algunos años.
 Un día el joven resolvió abandonar todo lo que había aprendido y regresar a aquel lugar y contarle todo a la familia, pedir perdón y ayudarlos.  A medida que se aproximaba al lugar veía todo muy bonito, con árboles floridos, todo habitado, con carro en el garaje de tremenda casa y algunos  niños jugando en el jardín. El joven se sintió triste y desesperado imaginando que aquella  humilde familia hubiese tenido que vender el terreno para sobrevivir, así que aceleró el  paso y llegando allá, fue recibido por un señor muy  simpático; el joven preguntó por la familia que vivía allí hacía unos  cuatro años, por lo que  el señor respondió que seguían viviendo aquí. Al  confirmar  que era la misma familia, elogió el lugar y le preguntó al señor: ¿Cómo hizo para mejorar este lugar y cambiar de vida?
El señor entusiasmado le respondió: nosotros teníamos una vaquita que cayó por el precipicio y murió, de ahí en  adelante nos vimos en la necesidad de hacer otras cosas y   desarrollar otras habilidades que no sabíamos que teníamos, así alcanzamos el éxito que sus ojos vislumbran ahora.


EL CONSEJO DE LAS 13 ABUELAS INDÍGENAS  (Del Nº 59)

(www.arboledadegaia.es)     

En Octubre de 2004 trece abuelas indígenas procedentes de distintos lugares del planeta se reunieron en Phoenix, Nueva York. Asistieron allí para dar cumplimiento a las antiguas
profecías comunes a todos sus pueblos que anunciaban que llegaría un tiempo de grave crisis en que ellas serían llamadas a unirse para salvar la Tierra y a todos sus hijos. En ese encuentro, y bajo el amparo del Center for Sacred Studies, ellas crearon el Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas, cuyo manifiesto reproducimos a continuación: “Somos el Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas. Venimos de la selva Amazónica, del Círculo Polar Ártico de Norte América, del gran bosque del noroeste americano, de las vastas planicies de Norte América, de los altiplanos de América Central, de las Blacks Hills del sur de Dakota, de las montañas de Oaxaca, del desierto del sudoeste de América, de las montañas del Tibet y de la selva de África Central.
”Afirmando nuestras relaciones con las comunidades de todo el planeta, hemos sido reunidas por la visión común de formar una nueva alianza global”.
”Nos hemos unido como una sola mujer en una alianza de oración, educación y sanación para la Madre Tierra. Trabajamos por todos sus habitantes y por todos los niños de las próximas siete generaciones.”Estamos profundamente horrorizadas por la destrucción sin precedente de la Madre Tierra, por la contaminación del aire, agua y suelo; por las atrocidades de la guerra, el azote global de la pobreza, la amenaza de las bombas nucleares, el derroche de la prevaleciente cultura del materialismo, las epidemias que amenazan la salud de los seres de la Tierra, la explotación de las medicinas indígenas, y la destrucción de nuestros modos de vida.”Nosotras, el Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas, creemos que nuestras maneras pacíficas de gestión y modos ancestrales de oración y sanación son vitalmente necesarios hoy.”Nos hemos unido para nutrir, educar y formar a nuestros niños. Para defender la práctica de nuestras ceremonias y declarar públicamente nuestro derecho a usar nuestras plantas medicinales libres de restricción legal. Nos hemos unido para proteger las tierras donde nuestras gentes viven y de la que dependen nuestras culturas, para salvaguardar la herencia colectiva de las medicinas tradicionales. En resumen, para defender la Tierra misma. Creemos que las enseñanzas de nuestros ancestros iluminarán el camino por este futuro incierto.”Nos unimos con todos aquellos que honran al Espíritu, con todos aquellos que trabajan y oran por nuestros niños, por la paz mundial, y por la sanación de la nuestra Madre Tierra. Por todas nuestras relaciones."Declaración fundacional del “Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas”. Nueva York, Octubre de 2004.