¡HOLA, SOY TU ALMA! (N° 131)
Aquella que te acompaña dentro tuyo, no solo desde que naciste, sino en
todas tus vidas, creas o no en ellas. Aquella que espera que despiertes algún
día y te des cuenta que soy toda sabiduría,
a la espera que recurras a mi algún día y que sientas definitivamente que estás buscando las
respuestas equivocadamente.
Estoy encerrado dentro tuyo, muy cerca de la parte de la parte de Dios
que sos en realidad, aunque le sigas dando demasiado poder a tu mente. Es como
si tomaras un taxi y porque el chofer está acostumbrado a manejar y conoce
todos los caminos posibles por su experiencia, también decidiera por vos a
donde ir, así funcionás la mayoría de las veces.
Sé que tengo que tener paciencia, tanta como sea necesaria hasta que tú
mismo decidas, porque el tiempo y la manera en que evoluciones depende de tu
libre albedrío. Ya lo sé, así son las reglas de este juego. Por eso solo puedo
esperar en silencio, tratando, eso sí, continuamente de darte señales de mi
existencia, pero sabiendo que primero debes aquietar a tu mente y a tu ego, al
cual le has dado demasiado poder. En realidad, todo te fue dado para que
desempeñaras tu papel en el teatro de la vida de la mejor manera, pero has
caído en la trampa de creer que tu papel de actor protagónico era tu propia
vida. Pero no importa, sé que algún día inexorablemente te darás cuenta de tu
error y lograrás el equilibrio que implica no dejarte arrastrar por tus
pensamientos, sino comenzar a que estos expresen tu sabiduría, que está dentro
tuyo, conmigo.
También sé, como te decía antes, que es una cuestión de evolución, nada
más.
Sé que hay un camino que tenés que recorrer y que cuando tomes
consciencia de todo esto no va a haber vuelta a atrás, porque así funcionan las
cosas cuando las personas despiertan. También quiero contarte que en ese
momento vas a notar que instantáneamente sos otra persona, y tu comprensión más
elevada verdaderamente te transforma en alguien diferente y ya no serás jamás
el que eras. Es como que tu visión estuviera bajo los efectos de un lente de
sol, y en algún momento, decides
sacártelo y descubres el verdadero color de las cosas. Hasta ese instante,
creíste sinceramente que todo era como lo veías, pero una vez que tenés la
posibilidad de descubrir las cosas desde otro lugar, no vas a volverte a poner
los lentes para sol porque ya sabés que todo es diferente, y entonces
comenzarás a disfrutar tu vida desde otro lugar, sin esfuerzo, con naturalidad
y armonía. Sabiendo, ante todo, que puedes recurrir a mi cuando quieras y con ello,
podrás obtener las verdaderas respuestas, no las que creías, sino las que son.
Mientras tanto, y hasta que descubras que no sos una mente en un
cuerpo, sino un alma dentro de un cuerpo, y que en verdad lo que te sustenta y
lo que te viene sustentando desde siempre es tu espíritu, y que si esto no
fuera así, simplemente no podrías existir, yo te voy a seguir esperando
pacientemente, como en todas tus vidas. Es mi trabajo como parte de Dios.
Solo por ahora me despido, hasta que simplemente evoluciones y de a
poco me dejes aflorar y te reitero algo que sé desde el comienzo mismo en que
te acompañe en tu primera vida, todo llega. También quiero que sepas que te amo
y que sos fruto del Amor Divino, y otra cosa, acostúmbrate a mirar tus ojos
reflejados en un espejo, así puedes comenzar a verme.
¡Hasta Pronto!
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