domingo, 23 de junio de 2013

EL MARAVILLOSO DESPERTAR DE LA CONSCIENCIA Por Sergio Lipp

A PUNTO DE CONOCER NUESTRA VERDADERA HISTORIA (Nº 104)

Estamos cerca de conocer nuestra verdadera historia, que tiene poco que ver con lo que hemos aprendido de ella. Los seres humanos aprendimos y transmitimos una historia fragmentada y acomodada a lo que podíamos saber y comprender de la misma. Como en una constante en nuestra vida, en la tercera dimensión todo lo tomamos en partes que se alejan de un todo, que es lo que hace en realidad que estas partes se unan y le den sentido. Y si no, observemos a nuestra ciencia médica: llena de especialidades que cortan al cuerpo humano en pedacitos como si todo no estuviera unido y cada parte respondiera autónomamente sin pertenecer a la totalidad. La verdad es que en todas las áreas hemos hecho lo mismo, en la historia, en la religión, en la economía, etc, etc. Todo tiene que ver con todo y nada se puede separar, acá en el planeta Tierra y en todo el Universo. Desde ya que es así, aunque a nosotros nos sucede que como desconocemos otras realidades, nos parezca que no.
Estamos en los tiempos en los cuales debemos borrar de nuestra mente todo lo que creemos y comenzar a reescribir la verdadera historia, que en realidad nos realza y nos enaltece y nos une de un modo inseparable a todo el Universo al cual pertenecemos y del cual descendemos. Estamos en los tiempos en los cuales en los próximos años, nos encontraremos (oficialmente y masivamente) frente a frente con otras civilizaciones, aquellas que no pertenecen a nuestro planeta, y en ese momento nos daremos cuenta que muchas son iguales a nosotros y entonces nos preguntaremos... ¿cómo es posible? Y en ese instante tomaremos consciencia de que en realidad, somos descendientes de las estrellas y que siempre han estado en contacto con nosotros, esperando pacientemente que evolucionemos y volvamos al lugar del que fuimos parte, para insertarnos nuevamente de donde alguna vez pertenecimos, en conjunto con ellos.
Por otra parte también tomaremos consciencia, que nuestra historia fue manipulada para dominarnos, de la misma manera que han hecho con nuestras religiones. Allí nos daremos cuenta que nuestro planeta fue poblado de diferentes maneras a lo largo de un tiempo que ni siquiera sabemos que existe, y que esta, la raza blanca, es la quinta raza que pobló la Tierra. Por eso nadie ha podido explicar convincentemente el distinto color de la piel de las razas que hoy existen en nuestro planeta, pero además, que explicación tienen los diferentes hallazgos de estructuras óseas de hombres de más de 3 metros o cráneos que no tienen nada que ver con el humano o construcciones antiquísimas que salen de contexto o además, como si fuera poco, hace un tiempo se han encontrado grabados similares a los de las líneas de Nazca, donde dinosaurios persiguen a... seres humanos. Y estos son simples ejemplos.
Y para terminar, queridos amigos, nuestra verdadera historia no cierra de ninguna manera si no incorporamos naturalmente la aceptación de los miles de vidas anteriores que la mayoría de nosotros hemos vivido, o sea el concepto de reencarnación, del que hablaba la Kábala judía así como los primeros cristianos (no nos olvidemos que la iglesia católica sacó por decreto todo lo referido a la reencarnación en el Concilio de Nicea allá por el año 325 de nuestra era).
Y lo digo, sabiendo sin lugar a dudas, que esto puede afectar la sensibilidad de gran parte  de la humanidad que ha recibido enseñanzas religiosas, que aún hoy se intentan mantener a
rajatabla. Porque también es cierto que aceptar otras realidades implica dar por la borda con gran parte de lo que se ha venido sosteniendo a lo largo del tiempo.
¿Pero,  saben una cosa? Ya es tiempo de descubrir la verdad y comenzar a adaptarnos a esta aunque nos lleve a cambiar todo lo que sostuvimos hasta ahora.


No hay comentarios:

Publicar un comentario